Un emotivo homenaje se realizó ayer en el predio de la Asociación Misionera de Pilotos y Navegantes de Rally (AMPyNaR) en Garupá, donde se esparcieron las cenizas del querido fotógrafo y difusor del Rally Misionero, Ramón Armando “Mandy” Pawluszek.
Gran cantidad de pilotos, navegantes, mecánicos, autos de rally, motos, cuatriciclos, socios de la AMPyNaR, dieron cita en el predio de la AMPyNaR en Garupá para cumplir con la última voluntad del querido Mandy.
Rosi, esposa de Mandy estuvo junto a toda su familia y fueron recibidos por la comisión directiva.
La ceremonia dio inicio con un oficio religioso donde se resaltó el valor de la amistad, algo que tanto pregonaba Mandy en cada rally.
Luego se procedió a plantar un árbol con las cenizas de Mandy, tal como el le pidió a su familia y que la comisión directiva de la AMPyNaR cumplió a rajatabla.
Para finalizar el homenaje el presidente de la AMPyNaR, Ignacio Allende entregó un cuadro con la firma de todos los amigos de los jueves que durante más de 15 años compartieron el asado de los jueves con Mandy. Acto seguido el piloto Raúl Fagundez también entregó un presente a la familia.
Y como nadie quería lágrimas, porque Mandy, no las quería, se realizó una caravana por el predio con los autos de rally, las motos, los cuatriciclos y los autos particulares, levantando polvo y haciendo maniobras, como le gustaba a Mandy en cada carrera.
El cierre fue a velocidad plena con los autos de rally, motos y cuatriciclos acelerando porque Mandy era sinónimo de rally.
Fue el último adiós al querido Mandy, que desde hoy su legado crece en el predio de la AMPyNaR en Garupá con cada acelerada.